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30/01/2023

"Tenemos la posibilidad y el deber de que Euskadi continúe siendo importante en el mundo de la investigación"

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"Por su ejemplariedad, por su trayectoria y por ser un canto a la esperanza que nos permite mirar al futuro con una sonrisa a pesar de los tiempos de incertidumbre que actualmente nos toca vivir". 

Con estas palabras de agradecimiento quiso Mireia Zárate, presidenta de la Sabino Arana Fundazioa, reconocer la labor de Mikel Sánchez durante la tradicional Gala que cada año celebra la Fundación en el Teatro Arriaga de Bilbao y que en esta ocasión alcanzaba la 34ª edición.    

El médico gasteiztarra, pionero en Europa en el avance de la Cirugía Artroscópica y el primer médico a nivel mundial en entender el potencial del Plasma Rico en Plaquetas (PRP) aplicado a la Traumatología, fue uno de los seis premiados junto a ASPACE Gipuzkoa, la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS), Irakli Kobakhidze, el equipo arqueológico que descubrió la Mano de Irulegi,  y el movimiento solidario Euskadi-Ucrania. 

Junto al resto de premiados en esta 34ª edición.

La cita en el imponente Arriaga congregó a una amplia representación institucional así como a  numerosas personalidades de la vida política, cultural y social del País. Ante todos ellos, Mireia Zárate puso en valor las investigaciones y el talento de Mikel Sánchez, "que han hecho que miles de personas tengan a día de hoy una movilidad y una calidad de vida altísima, a pesar de sus lesiones físicas". 

En su turno de palabra, visiblemente emocionado y sumamente honrado y agradecido por el reconocimiento recibido, el médico gasteiztarra dedicó el premio a sus aitas, de los que aprendió “la importancia de la verdad, la libertad, la constancia o el trabajo”, y recordó que, precisamente por la defensa de aquella ansiada libertad, “mi familia tuvo que exiliarse en Iparralde, escapando, como tantos otros de la dictadura franquista”.

En la imagen superior, el Doctor Sánchez, en un momento de su discurso; sobre estas líneas, saludando al Lehendakari Iñigo Urkullu, que presidió la entrega de los Premios Sabino Arana.

Tras realizar un repaso a su vida y fructíferos estudios e investigaciones, recordó su trayectoria en el mundo de la Biología y la Medicina Regenerativa, además de su labor al frente de la UCA (Unidad de Cirugía Artroscópica), que fundño en 1998, 

Para terminar, lanzó un alegato mirando al futuro. “Tenemos la posibilidad y el deber de que Euskadi siga siendo importante en el mundo de la investigación. Es fundamental la colaboración entre todos. Entre los ámbitos público y el privado. Tengo muy claro que el futuro no depende solo de una persona sino de un equipo, por eso mi gran ilusión y mi empeño está en que todo este equipo tenga continuidad y siga investigando y siga buscando soluciones que mejoren la salud de nuestros pacientes”.

La concesión de los premios volvió a gozar de un notable impacto entre los medios de comunicación.